Un sueño hecho realidad

Con los pies junto a la orilla, en el preciso lugar donde las pequeñas olas rompen contra la playa se quedó de pie. Miraba al horizonte mientras las olas iban y venían y la enterraban más y más en la arena.  “Nunca entendí el por qué de ese fenómeno. Si te quedas de pie en ese justo punto, te vas hundiendo poco a poco,  curiosa alegoría”, pensó. “En la vida las cosas van y vienen y poco a poco te van enterrando en lo que eres, hasta que llega el momento en que no te puedes mover. Cuando eres joven, igual que al principio de ponerte en la orilla, es fácil sacar los pies y cambiar de lugar, pero cuando vas dejando que pase el tiempo te vas anclando. De repente una ola viene y te encuentras comprándote un piso que te entierra un poquito más. Otra ola y viene la pareja, el matrimonio, los niños. Y ya no te puedes mover” Y tú mientras, mirando el horizonte. Cuanto más piensas lo hermoso que es lo que tienes enfrente, menos opciones tienes de llegar a ello. “ Rompen las olas y un escalofrío recorre su cuerpo. Saca los pies de la arena comienza a andar por la playa. Está de vacaciones, camina mirando al suelo, es hermosa la arena, pero no te quedes parado, o te atrapará. Historias y pensamientos de Carlos Melero. .
A continuación les dejamos unas imágenes de esas olas con las que todos soñamos y solo unos pocos afortunados son quienes disfrutan de ellas.